Reseña | De Seúl al cielo - Silvia Aliaga y Tatiana Marco

    De Seúl al cielo

de Silvia Aliaga y Tatiana Marco
Ilustraciones: Inma Moya

Género | Narrativa juvenil

Editorial | Nocturna
Fecha de publicación | Noviembre de 2018

Páginas | 608

Dicen que las personas destinadas a conocerse están unidas por un hilo rojo.

Paula es una bailarina española recién llegada a Seúl con un sueño roto: la ciudad no es como se esperaba y la persona a la que más ansiaba ver la ha traicionado. 

Cris es una joven británica con una única misión: devolver un colgante a una estrella del K-pop que se cruzó con ella en Inglaterra, el culpable de que todo empezara a ir mal... Pero debe hacerlo pronto, porque el problema que les oculta a su amigo Dani y a su nuevo compañero de trabajo, Minwoo, está a punto de estallar. 

Jay es esa estrella, miembro del grupo R*E*X, donde tanto él como Hyunsoo, Alex y Young despiertan el entusiasmo de millones de seguidores. Lo que muy pocos saben es que las cosas no van bien entre sus miembros y un secreto amenaza con destruir todo por lo que han luchado.

Cuando los caminos de estos desconocidos se entrelacen, sus vidas cambiarán para siempre.

Y el hilo rojo del destino puede enredarse, pero nunca romperse.

Sobre las autoras Silvia Aliaga y Tatiana Marco

Silvia Aliaga (Zaragoza, 1984) y Tatiana Marco (Zaragoza, 1987) son amantes del K-pop. Han asistido a conciertos en Corea, Japón Francia y España. Se conocieron en el fandom de Harry Potter muchos años atrás, y De Seúl al cielo es su primer proyecto literario juntas. Han necesitado tres años para contar la historia como querían.

Opinión personal

¡Hola queridos ecos! Hoy vengo a hablaros de una novela que llevaba esperando desde que conocí la noticia de que iba a publicarse una historia cuyo hilo argumental giraba entorno al k-pop. Y es que sí, he de confesarlo, ¡yo también he caído! A principios de año me dejé arrollar por él y no podría estar más feliz por ello. Tal vez sea esa la razón por la que este libro haya sido tan especial para mí, porque me siento identificada y siento los personajes tan cercanos como siento a los idols de mis grupos favoritos. Ahora bien, esto no quiere decir que no puedas disfrutar de él si no estás metido/a en este mundo, ¡al contrario! Creo que es genial para entender un poco mejor un fenómeno que cada vez tiene más seguidores y que nos hace felices a tanta gente. Así que, sin más dilación... ¡Demos paso a la reseña! 

Antes de empezar tengo que destacar algo que me llamó la atención desde el primer momento: la edición está cuidadísima. Y ya no solo hablo de la portada, que es preciosa, sino que el interior está igual de mimado. Nada más abrir el libro nos encontramos con una serie de ilustraciones de los personajes que ya te comienzan a dar pistas de cómo pueden ser las personas que se encuentran dentro de las páginas. En cuanto a la historia en sí está contada por tres narradores: Paula, Jay y Cris. Cada capítulo viene encabezado por una ilustración de algo que define a ese personaje y me ha parecido muy acertado. Además, la narración de Cris que forma parte de un diario... ¡Tiene hojas que simulan las de un diario y no están numeradas! Por otra parte, las autoras han creado una playlist para la historia y la ilustradora, Inma Moya, ha diseñado también el álbum y el lightstick del grupo. En resumen, que el formato es de lo más interesante y algo que aplaudir a todos aquellos que han trabajado en él.

Y ahora... ¡Os presento a los personajes! 

Paula      

                    Minwoo

     
Cris                                   

 Dani

Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo rojo se puede estirar, contraer o enredar, pero nunca romper.

JayAlex

R*E*X

Young     Hyunsoo

La aventura de Paula comienza cuando la contratan como bailarina en un concierto de R*E*X, el grupo coreano por el que lleva suspirando muchísimo tiempo. A partir de entonces, una historia por cerrar la llevará a recorrer medio mundo buscando respuestas. 

Por otra parte, Cris, una española que ha terminado trabajando y viviendo en Londres con su gran amigo Dani, cruza su camino con un miembro de R*E*X y este hecho marca su vida para siempre. Un acontecimiento inesperado la arrastrará a ir en su busca a un lugar que, hasta entonces, no significaba nada para ella: Seúl. Allí conocerá a Minwoo, el dulce dueño de una cafetería, que le abrirá las puertas de su hogar y le permitirá descubrir Corea y su cultura. 

En una realidad prácticamente paralela se desarrolla la historia de los miembros de R*E*X, un grupo de k-pop que lleva años siendo el rey musical de Corea y del resto del mundo. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce y dos de ellos, Jay y Hyunsoo empiezan a estar cansados de todo lo que conlleva la fama. Además, echan de menos la familia que formaban los cuatro miembros que, desde que Alex, su líder, está más distante, ya no ha vuelto a ser lo que era Young, el más joven, será el único que intente recordarles quienes fueron años atrás.

No he querido desvelar mucho más de la trama porque quiero que lo descubráis vosotros mismos. De lo que sí hablaré es de lo que más me ha gustado y lo que menos. 

En primer lugar, como ya he mencionado me he sentido identificada con los personajes y eso me ha facilitado muchísimo la inmersión.  Llevo siendo fan —en general, no solo de k-pop— muchísimos años y siempre he tenido que enfrentarme a las personas que no comprenden cómo nos sentimos. Es un sentimiento muy difícil de explicar para quien no lo ha vivido y en eso las autoras han hecho un trabajo formidable, pues son capaces de expresarlo a la perfección a través de esta historia. 

Sabía que mucha gente no entendía lo que era sentirse tan unido a alguien que tal vez sólo hubieses visto en una pantalla o escuchado por un altavoz, porque era algo incomprensible a menos que lo hubieras experimentado en persona, a menos que una canción hubiera conectado tan profundamente con tu corazón que te hiciera creer que quien la interpretaba te conocía mejor que nadie en el mundo. 

En segundo lugar, me ha fascinado un elemento esencial en la trama: la pasión. Por una parte, la de Paula por el baile y, por otra, la de los miembros de R*E*X por la música. 

Todo el mundo tiene una canción, un disco que compone la banda sonora de su vida, que siempre está ahí tanto en los buenos como en los malos momentos.

Lo bueno de cantar juntos era que todos los problemas internos dejaban de existir de golpe y daban paso exclusivamente a la música. Llevaban tantos años haciendo aquello que podían armonizar sin problemas de un modo natural, como si hubieran nacido ya capaces de semejante hazaña. Siempre que Jay cantaba con los otros tres, sentía que conseguirían hacer cualquier cosa que se propusiesen. 

Además, también se hace patente la importancia de luchar por lo que se quiere, a pesar de que el mundo vaya en tu contra. Muchas veces nos paralizan ya no solo el miedo a lo desconocido y al fracaso, sino las personas a nuestro alrededor que, en un intento por evitar la caída, nos cortan las alas. A esas personas: dejad que nos equivoquemos. Todos los personajes de De Seúl al cielo han tenido que enfrentarse a esta realidad en algún momento de su vida y todos ellos han sacado dientes y garras defendiendo sus sueños y eso es algo que admirar. 

Era la sonrisa resignada de quien piensa que los sueños así son más propios de los cuentos de hadas que de la vida real. Y por eso ella estaba dispuesta a esforzarse al máximo para demostrarles que se equivocaban. 

En cuanto a los personajes he de destacar lo bien perfilados que están. A pesar de la multitud de protagonistas que tenemos en la novela, cada uno tiene una voz propia y son fácilmente distinguibles unos de otros, lo que los hace muy realistas. He agradecido enormemente que las autoras hayan humanizado a los idols. Por mucho que cueste creerlo, aun a día de hoy hay personas que se creen con derecho a todo con respecto a sus ídolos por el simple hecho de que ellos son famosos y su vida es pública. No, no es así. Son personas y como tal, hay que respetarlos. Han hecho de R*E*X una realidad y han dejado ver que, tras bambalinas, no todo es tan bonito. Además, he podido ver en Hyunsoo, Jay, Alex y Young rasgos de mis propios idols y la historia se ha vuelto mucho más personal e íntima para mí, pues sentía como si estuviera viendo sus vidas a través de la de estos personajes. 

Además, todos los personajes evolucionan, ninguno termina tal y como empezó en el libro. Algunos de ellos empiezan siendo muy fantasiosos pero acaban madurando y, sin perder de vista sus objetivos y sus sueños, ponen los pies en la tierra.

Un mundo que había empezado girando en torno a un sol cegador y temible, al que casi dolía mirar directamente, como era Jay, pero que poco a poco se había ido apagando y dado paso a un vasto cielo lleno de estrellas, quizá mucho menos impresionantes, pero que a Paula le hacían mucho más feliz. 

Pero sin duda, con lo que me quedo del libro es con el mensaje de amistad que lanza. Es precioso ver cómo se van formando lazos tan profundos entre personas que, en un un principio, no tenían nada que ver y que terminan convirtiéndose prácticamente en familia. Y los más importante es que, mientras ellos van uniéndose poco a poco, tú te unes a ellos también y cuando terminas la historia queda un extraño sentimiento de vacío, pues sientes que te estás despidiendo de unos viejos amigos. 

Las autoras también hacen una crítica a la cultura coreana y a su posición conservadora frente a algunos temas, haciéndonos ver a través de los ojos de los personajes lo que supone haber nacido allí y estar expuestos a su visión del mundo.

Por último, aunque pocos, también han habido aspectos que no han terminado de convencerme. Parte de la esencia y magia de la trama radica en el hilo rojo del destino, pero hay demasiadas casualidades y llega a chirriar en algún momento que se den ciertas situaciones, pues le quita cierto realismo a la historia. 

Al principio los personajes son muy fantasiosos y hay grandes dosis de instalove, lo que hace que en las primeras páginas te lleves una impresión de la historia que no tiene nada que ver con lo que se desarrollará más adelante. Esto puede ser un punto en contra para las personas que abandonan fácilmente los libros. Si lo sois, seguid leyendo. Creedme, merece mucho la pena.

En definitiva...

Me ha gustado...

El formato (portada, ilustraciones, playlist...); me he identificado con los personajes, que luchan por lo que quieren y viven su vida con pasión; se ha humanizado a los idols y he podido ver en ellos rasgos de mis propios ídolos; ningún personaje es plano, todos evolucionan de alguna manera; se lanza un mensaje de amistad precioso; se critica el pensamiento conservador en Corea.

Te gustará si...

Te gustan las historias cuyos personajes crecen a lo largo de la trama y que, a pesar de no tener nada en común, terminan creando lazos profundos y sinceros.

Te gustaría adentrarte en el mundo del k-pop o, por el contrario, ya estás inmersx en él y te apetece leer una historia en el que sea el protagonista.

No me ha gustado

Hay demasiadas casualidades, a pesar de que el libro trata sobre exactamente eso, el destino; al principio da la sensación de ser una historia repleta de fantasía e instalove,  aunque termina siendo algo totalmente distinto a lo que te habías imaginado.

Mi puntuación

                  


★★★★★